En la localidad hay múltiples establecimientos para degustar la gastronomía de la zona, ya con una buena comida o cena en los restaurante de la localidad o con la compra de productos típicos en los comercios.
Además pueden pasar la noche en los hoteles, casa rurales o albergues de la zona, cuidados hasta el mínimo detalle.
Si les queda ganas de seguir disfrutando de Vilafranca puede dedicar un día de compras en los comercios locales.